Estas formaciones, sin
embargo, no son nuestros únicos yugos. La adhesión a opiniones sin fundamento es
otra forma de amarrarnos al sufrimiento. Las opiniones sesgadas son toda esa gama
amplia de creencias y doctrinas que adoptamos ‘porque sí’ y que carecen de
apoyo racional verificable. Nuestro apego a las opiniones infundadas las
convierte en ‘nuestras’ posesiones mentales.
A diferencia de los
bienes materiales, nadie puede robarnos las opiniones; no obstante, estamos
siempre dispuestos a defenderlas cuando no a propagarlas: Mientras más ferviente la
creencia, más férrea será nuestra acción. Las opiniones -religiosas, políticas,
raciales, deportivas o sectarias de cualquier índole- obnubilan la razón,
confunden el lenguaje y alteran el comportamiento.
Los apetitos básicos (de
comida, agua o sexo) provienen de necesidades biológicas; los temores razonables
a peligros reales (pistolas, depredadores o calamidades) son los mecanismos
neuronales auto-codificados que protegen nuestra supervivencia. Las opiniones, en
cambio, no satisfacen ningún requerimiento vital; no existen opiniones ‘naturales’
desarrolladas por el código genético o adquiridas como protección biológica.
Cuando un sesgo se posesiona
en nosotros, sin embargo, consideramos interesante cualquier planteamiento que concuerde
con nuestros prejuicios y experimentamos aversión contra cualquier opinión que
contradiga la nuestra. En el primer caso, buscamos la compañía de quienes
comparten nuestra ‘sabiduría’. En el segundo, el poseedor de opiniones
enfrentadas es nuestro potencial enemigo.
Las personas prejuiciadas
son incapaces de reconocer sus contradicciones o falacias pues su estructura
mental les ofusca su visión. Ellas piensan que el color de su cristal es el único
existente. No es posible explicar ‘verde’ a alguien que sólo ve ‘amarillo’ y su
reacción siempre será: "No entiendo cómo usted no ve la amarillez en mi
punto de vista”.
Las opiniones sesgadas
son también formaciones mentales perjudiciales y dominantes con un impacto negativo
en nuestros razonamientos. En cualquier análisis, las opiniones sesgadas son más
destructivas que unos datos deficientes o una capacidad analítica limitada.
Dice el filósofo alemán Arthur Schopenhauer (los paréntesis son agregados):
"Las opiniones preconcebidas bloquean el hallazgo de la verdad con mayor efectividad
que las falsas apariencias promotoras del error (información dudosa) o que los recursos
débiles de razonamiento (falta de sentido común)".
Cuando buscamos exactitud
y confiabilidad, la influencia dañina de datos inciertos o lógica deficiente se
desvanece en comparación con las distorsiones creadas por los puntos de vista
sesgados. Una revisión cuidadosa de los procedimientos seguidos en una
evaluación, sea por terceros o por la misma persona que efectuó el análisis, permite
siempre detectar las anomalías en datos o lógica. No es así cuando llegamos a
conclusiones a través de opiniones sesgadas, pues nos volvemos incapaces de
reconocer nuestros propios errores o de aceptar el asesoramiento correctivo que
nos puedan brindar terceros. Solamente consideraremos ‘correctas’ aquellas
opiniones que coincidan con la nuestra.
La gente rara vez cambia
de opinión; mientras más sesgado el prejuicio, más difícil su modificación.
Esta resistencia es particularmente evidente en el campo de las creencias
religiosas y las doctrinas políticas. No sucede así en las ciencias naturales.
A medida que avanza el conocimiento, los puntos de vista científicos evolucionan
y reemplazan los modelos obsoletos.
Las
personas con opiniones opuestas siempre tendrán imágenes diferentes de una
misma realidad; ellas ven el mundo exclusivamente a través de los ojos mentales
de sus propias opiniones. Sin lugar a dudas, los puntos de vista sesgados son
el peor obstáculo para la verdad en cualquier territorio. Y ese no es el peor
problema. Lo realmente grave es que las opiniones sesgadas, además de llevar al
sufrimiento individual, son la raíz del fanatismo del cual surge
inevitablemente la violencia social.Gustavo Estrada
Autor de "Inner Harmony through Mindfulness Meditation"
gustrada1@gmail.com